Tiempos de duración de la terapia de orina
La orina, nuestra propia orina, ingerida por la boca y por la piel, y aplicada conforme a la Terapia de Orina es la substancia terapéutica más eficaz y de acción más rápida que existe.
La duración que yo recomiendo de una terapia de orina (para cualquiera de las modalidades de terapia que se exponen a continuación) es de un mes, independientemente de que la curación de una determinada enfermedad pueda sentirse en mucho menos tiempo.
La eficacia curativa de la orina se extiende no sólo al tratamiento y completa curación de prácticamente cualquier enfermedad sino también al mantenimiento de la salud.
Terapia de orina: ayuno de orina.
Al igual que hace Armstrong en su libro, nosotros empleamos indistintamente las expresiones terapia de orina y ayuno de orina, como sinónimas. Se trata pues de un ayuno parcial, siendo la orina (complementada con agua) el único “alimento” que se ingiere.
En la vida moderna, las enfermedades así como los tratamientos con frecuencia se eternizan, por lo que fácilmente podemos no vernos nunca libres ni de la enfermedad ni de su tratamiento, lo que se suele asumir como normal.
Todo lo contrario de lo que ocurre con la terapia de orina, la cual une a su poderosa e inigualable eficacia curativa, su también inigualable rapidez de acción.
Rapidez de acción y efectividad de la terapia de orina.
La utilización milenaria de la orina, en toda época y lugar, como agente terapéutico ha sido resucitada y renovada en tiempos modernos por Armstrong en forma de Terapia de Orina, con la publicación en 1944 de su libro El agua de la vida, tratado sobre terapia de orina.
La orina, verdadera y auténtica panacea universal para tratamiento de todo tipo de enfermedades y mantenimiento de nuestra salud, es esa substancia despreciada y considerada producto de desecho por la generalidad de las personas.
La efectividad de la orina es tan extraordinaria que no necesita más que unos días, un mes todo lo más, para efectuar no solamente una curación completa, sino para llevarnos a un estado de alegría, de ánimo, euforia y salud superior al que nunca hayamos experimentado. Y ello, tal como puedo testificar yo mismo por propia experiencia, tras experimentar una casi instantánea sanación de un cáncer de próstata avanzado con metástasis.
La prodigiosa efectividad de la orina se pone de manifiesto incluso cuando la terapia es aplicada in extremis y como último recurso, en las enfermedades más graves o enfermos desahuciados. Enfermos desahuciados bien sea por parte de la medicina convencional bien sea, incluso, por parte de la medicina alternativa y naturista.
Distintos tiempos de duración y modalidades de la terapia de orina.
El tiempo de duración de una Terapia de Orina, puede ir desde unos días a un mes aproximadamente.
El tiempo de duración y modalidad concreta de un tratamiento de orina, no contando con un terapeuta de orina que nos asesore o de un médico convencional que pueda hacernos un seguimiento periódico (ambas cosas serían muy de desear y recomendables), no tendremos más remedio que determinarlo y regularlo nosotros mismos.
Al poco tiempo de iniciado un tratamiento (al cabo de una o dos semanas) puede ocurrir y de hecho ocurre con frecuencia que podamos tener la sensación, que puede ser muy acertada, de habernos sanado por completo de la enfermedad que nos aquejaba. La sensación puede ser no solo la de encontrarnos perfectamente bien, sino, lo que puede ser más significativo, podemos encontrarnos con un gran estado de ánimo.
Ahora bien, estas sensaciones psicológicas pueden ser engañosas por lo que no podemos precipitarnos en dar por terminado y con éxito un tratamiento de orina.
Mi recomendación es continuar con el tratamiento, en todo caso, por lo menos durante un mes. Un mes suele ser más que suficiente en la inmensa mayoría de los casos para que la terapia de orina haya podido tener todo su efecto y se haya producido la completa y segura curación de prácticamente toda enfermedad, salvo excepciones, que apuntaremos más adelante.
Modalidades de terapia de orina: compresas de orina
La Terapia de Orina se aplica básicamente de igual forma, con muy ligeras variantes, a toda enfermedad: ingestión de orina por la boca y por la piel, complementada con beber agua según necesitemos.
Caso de no poderse hacer friegas de orina sobre determinadas zonas de la piel, tales como sobre llagas, abultamientos o tumefacciones, lo que procede y es imprescindible, es aplicar compresas de orina sobre dichas zonas.
Las “compresas de orina” consisten simplemente en paños empapados de orina, paños que se mantienen empapados en orina añadiéndoles periódicamente la orina, preferentemente del propio enfermo.
La aplicación de compresas de orina no quita para que se efectúen friegas de orina por las demás partes del cuerpo no afectadas. Las friegas y demás detalles de la terapia de orina, debemos aplicarlas conforme prescribimos en los apartados Aplicación de la terapia de la orina abril 12, 2021, y en Prácticas parciales de la terapia de orina en todo momento y circunstancia junio 25, 2021.
Caso de extrema debilidad del enfermo no pudiéndosele aplicar friegas de orina sobre ninguna parte de su cuerpo, se aplicaran compresas de orina por diferentes zonas de la piel, particularmente sobre el bajo vientre, zona genital, pecho, cuello y pies.
El contacto de las compresas de orina con la piel tiene mucha mayor duración que el de friegas, desde unas horas a días completos, razón por la que las compresas de orina bien aplicadas pueden tener el mismo efecto curativo que el de las friegas.
Aplicación rigurosa de la Terapia de Orina: Ayuno estricto de orina
Mientras no se indique lo contrario cuando hablamos de ayuno de orina o terapia de orina, nos estamos refiriendo a la modalidad estricta de su aplicación.
No nos cansaremos de repetir que en la modalidad “clásica”, rigurosa y estricta de la Terapia de Orina, no se ingiere ningún alimento, ni se utiliza ninguna otra substancia (salvo agua, según se requiera) que no sea única y exclusivamente nuestra propia orina (o de otra persona, cuando sea preciso), orina que se ingiere tanto por la boca, bebiéndola, y (al mismo tiempo) por la piel mediante friegas.
Ayunos parciales de terapia de orina.
Puede ocurrir que una persona no soporte un ayuno estricto de orina y agua, en esos casos se debe intentar dicho ayuno estricto durante el mayor tiempo posible, de al menos 2, 3 días o una semana, para luego seguir durante un tiempo (hasta completar al menos un mes o mes y medio) con una terapia de orina de ayuno parcial. Es decir, una terapia de orina complementada con una dieta lo más ligera posible.
Dieta muy ligera a base de caldos, sopas o verduras (siendo el repollo la verdura más recomendada y valorada tradicionalmente y desde la noche de los tiempos).
Ni la fruta ni los zumos de fruta son recomendables en un ayuno parcial de terapia de orina. La fruta o los zumos de fruta pueden contener un exceso de azúcar (respecto a la terapia de orina) y carecen de importantes nutrientes, nutrientes que en cambio pueden ser aportados por verduras, sopas o caldos.
Ayunos intermitentes de orina
Otra posible modalidad de aplicación de la terapia de orina, cuando otras modalidades resulten inconvenientes por su larga duración o por cualquier otro motivo, sería la de practicar ayunos estrictos o parciales de orina de forma intermitente, de 3 a 7 días de duración por ejemplo, intercalando periodos de suspensión de la terapia, periodos de suspensión que no denominamos “periodos de descanso”, dado que la terapia de orina es eminentemente una terapia de descanso.
Catarros y resfriados, efectividad de breves ayuno de orina.
Ante los primeros síntomas de un simple catarro muchas personas recurren de inmediato a tomar medicamentos para “cortar de raíz” el resfriado. Efectivamente se suprimen síntomas, tales como tos, moqueo o secreción nasal, pero ello no supone la curación de la incipiente enfermedad, todo lo contrario, es un barrer debajo de la alfombra.
De hecho, la gripe, neumonía, bronquitis y similares enfermedades respiratorias graves a menudo no son más que el resultado de suprimir los procesos curativos puestos en marcha por de la naturaleza.
Lejos de tratar de suprimir los síntomas catarrales, debemos felicitarnos por los mismos, y es que nuestra naturaleza se sirve de estos pequeños resfriados para hacer una “limpieza del hogar”.
Incluso un simple ayuno con agua puede curar totalmente un resfriado en tan solo uno o dos días.
¡MUCHA ATENCIÓN! La terapia de orina es PLENAMENTE eficaz únicamente cuando es aplicada de modo estricto, en base a un ayuno de orina y agua.
La razón está en el ayuno. El ayuno por sí solo, es uno de los agentes terapéuticos más poderosos que existen. Tanto hombres como animales recurren instintivamente al ayuno cuando se sienten enfermos. Un ayuno de pocos días puede mejorar en incluso curar completamente la inmensa mayoría de las enfermedades.
Sintiéndonos enfermos, el ayuno pone a nuestro organismo en modo curativo. Nuestro sistema inmunitario pone en marcha todas las resortes defensivos de nuestro cuerpo, tales como anticuerpos, y se dirigen a atajar el daño, bien sea la cicatrización de una herida, la recuperación tras un envenenamiento alimentario o tras una indisposición, o la neutralización de una infección
Cuando lo que nuestro cuerpo nos pide es un ayuno y nosotros en cambio ingerimos alimentos, lo que estamos haciendo es distraer nuestras fuerzas auto curativas en procesos de digestión y asimilación.
Particularmente la digestión y asimilación de las proteínas contenidas en los alimentos exigen a nuestro organismo el gasto de una gran cantidad de energía.
Por si fuera poco lo habitual es que comamos en exceso lo que añade un esfuerzo de excreción por parte del sistema digestivo, hígado y riñones.
Así, la ingestión improcedente de alimentos cuando nuestro cuerpo nos pide un descanso de ayuno lo que hace es desorientar a nuestra sistema defensivo e inmunitario con el resultado de que la enfermedad lejos de curarse se agrava, lo que va a requerir tratamientos más agresivos por parte de la medicina convencional.
Es lástima el que a pesar de los beneficios demostrados que puede aportar un pequeño ayuno de tan sólo unos días, no se aplique en medicina hospitalaria como medida complementaria, regenerativa y preparativa para ulteriores tratamientos.
En cuanto la terapia de orina o ayuno de orina, que es de lo que aquí se trata, el efecto del ayuno catapulta y acrecienta las capacidades auto-curativas y auto-regenerativas de nuestro organismo. En efecto. El ayuno de orina es “más ayuno”, que el simple ayuno.
Por un lado no es un ayuno total, es un ayuno que aporta un “alimento”, nuestra orina. Nuestra orina, que acaba de salir de nuestro cuerpo, no requiere ningún esfuerzo de digestión. La orina, entre otros múltiples elementos y compuestos, contiene células madres, las cuales, tal y como demuestra la propia medicina convencional, una vez en el torrente sanguíneo se dirigen automáticamente a las zonas enfermas del organismo.
Es decir, al igual que ocurre con el ayuno, solo que de forma acrecentada, con el ayuno de orina, todas las fuerzas del organismo se centran en combatir la enfermedad y producir la curación.
El inconveniente del ayuno simple, es que no aporta nutrientes, cosa que si hace la orina.
Indudablemente el ayuno pone al cuerpo en modo curativo. Ahora bien, el efecto curativo de la terapia de orina es muy superior al simple ayuno, dado que aporta un sinfín de substancias, ninguna ajena a las que contiene la sangre, lo que permite una más segura regeneración de órganos y tejidos los cuales están sufriendo un desgaste acrecentado por la enfermedad.
¿Pierde eficacia la terapia de orina cuando es complementada con una dieta, aunque sea ligera?
Indudablemente. No cabe duda de que la orina por si sola, es un poderoso agente curativo, incluso fuera de los procedimientos propios de la Terapia de Orina. En algunos casos y enfermedades, una sola gota de orina ingerida por la boca, puede producir un completo efecto curativo: efecto de auto-vacunación.
Sin embargo, todos los múltiples y variados efectos curativos de la orina no se despliegan en toda su plenitud si el “ayuno de orina” es parcial, esto es, cuando el ayuno de orina (normalmente de un mes de duración), se complementa con la ingestión de alimentos.
¿En qué casos la terapia de orina puede no ser eficaz?
Lo que llevamos expuesto no significa que con la terapia de orina seamos capaces de curar toda enfermedad y enfermo. A continuación enumero los casos de enfermedad o condición del enfermo, que no responden a la terapia de orina.
1.- Enfermos tratados de forma intensiva con radioterapia y quimioterapia. La terapia de orina puede no ser eficaz en enfermos muy graves o terminales tras haber sufrido tratamientos intensivos de radioterapia o quimioterapia.
2.- Artritis reumatoide. Según expone el propio fundador de la terapia de orina, Armstrong, la artritis reumatoide severa a veces no responde a la terapia.
3.- Diabetes de tipo 1. La diabetes de tipo 1, es una enfermedad auto-inmune en la que el sistema inmunitario ataca como extrañas las células del páncreas que elaboran la insulina, con lo cual el cuerpo no produce insulina. Se puede decir que terapia de orina es ineficaz ante esta enfermedad, pero puede ser tratada eficazmente a base de insulina y un estricto control en la dieta.